Mi primera carrera.

Hola, me llamo Jedey Mederos. Antes jugaba al fútbol, hoy.... doy pedales. Y el sábado pasado viví mi primera aventura en una carrera.


Ya mi padre seguro les contó lo que me pasó en el fútbol, así que les contaré que llevo unos meses entrenando con la escuela del Tamadaba Biker en Agaete, pero no es lo mismo entrenar que ir a una carrera. Así que mi padre no me dejó apuntarme a la de Valleseco, sino que primero me llevó a verla, con la condición de que si me gustaba podría inscribirme a la siguiente que hubiera. Me encantó. El sitio, el ambiente, los niños, los padres, el recorrido todo me gustó mucho. Así que mi padre me dejó apuntarme a la siguiente que se celebrase.


La siguiente resulta que era la Cronoescalada Barranco de Telde.  Mi padre no estaba muy convencido, porque la carrera, por ser una crono, obligaba a que yo estuviera un buen rato fuera de su vista. Por eso me llevó la semana antes a que viera como era el recorrido, y creo que para que no me perdiera también. Fuerte hombre desconfiado. Nada más llegar nos encontramos a Dani y a su padre Ezequiel. Ya ver una cara conocida me animó. Vimos muchos niños entrenando, alguno incluso de mi cole. Total, que nos subimos dos veces el barranco.  ¡Mi padre hasta me llevó por arriba de la meta y casi me hace llegar a Tara!  Así y todo, mi padre estuvo llamando al organizador, alguien del club Atlefulca, para preguntarle por el recorrido, la organización, seguro que lo volvió loco.... Incluso el día de la carrera mi hizo cargar con un móvil en la riñonera por si se me rompía la bici, decía él. Fuerte miedica está echo mi viejito.



Ya inscrito, estuve toda la semana dándole vueltas a la cabezita. Que sí voy, que si no voy, que si voy, que si no voy.... Pero nada, el sábado aparecí en Telde con toda mi familia. Y según llego, me veo a mi compi de equipo Aitor. Entonces ya todo fue a mejor. Nos dieron unos números para poner en el manillar, que nos dijeron se llaman dorsales, y que es para todo el año. Nos pusieron musiquita y el barranco se llenó de niños, grandes, medianos y chicos, todos con bici. Aquello era genial, todo muy alegre y divertido. Así que cuando por los altavoces dijeron algo como que los niños ya iban a empezar la bajada hacia la salida, ni adiós les dije a mis padres..... ¡salí tendido!


Cuando llegamos abajo, tuvimos que esperar un buen rato, a que fueran pasando los mayores, los cadetes e infantiles, que después nos tocaría a nosotros. Yo, que sin ser a Daniel no conocía a nadie, estuve un poco aburridillo al principio, pero enseguida me puse a hablar con los otros niños y hasta me hize un nuevo amigo, Iker, que ni sé de qué equipo es. Pasé un poco de frío, estabamos muy cerca de la mar, pero habían más ganas de empezar que frío. Y llegó el gran momento, me llamaron para que me pusiera en salida. Me preparé, y de nada que me avisaron, salí lanzado.  Por el camino todo el mundo me animaba, unos con ropa verde, otros azul, amarilla.... daba igual el equipo, todo el mundo anima a todo el mundo.  Me adelantaron unos cuantos, que iban rapidísimo, pero yo lo tenía claro, yo iba a hacer mi carrera, a disfrutar, iba al golpito. En mi cabeza iba oyendo las canciones del cantajuego que tanto le gustan a mi hermanito pequeño, y con esa música avanzaba a y avanzaba dando pedales. Por el camino ví un niño que se había caído, y como lo primero es lo primero, paré un momento para ver como estaba, y al ver que estaba bien, seguí. Yo también me caí, sin que me pasara nada. Pero no sé porqué, me animé y me puse a dar pedales como un loco con un grupillo con el que llegamos a meta todos juntos. Según paré la bici, llegó mi padre y me abrazó, parecía que estaba más contento que yo mismo.  También me dijo que estaba más rojo que la camisa que llevaba puesta. Mi madre me dio un beso tan grande que me dejó la mejilla más roja todavía, y todo el mundo me daba las felicidades por haber terminado, y como me dijo Claudio, haber terminado dando pedales con fuerzas de sobra.

La organización daba un desayuno, y además una blusa, que me puse enseguida muy contento. Ahora le tocaba el turno a mi compi Aitor. Según me contaron mis padres, Aitor después de que me fui para abajo, se puso triste porque no tenía ningún amigo cerca, y decía que no quería correr la carrera.  Por eso me puse con él a rodar por allí, hablando y riéndonos y poco a poco se fue alegrando. Y cuando llegó el momento, se puso en la salida, y corrió como nos tiene acostumbrados en la escuela, como un pequeño avión..... ¡quedó tercero!  Yo me alegré muchísimo por él, somos del mismo club y somos amigos, y verlo feliz me hace feliz. Tan contento estaba, que para la foto de grupo ni me quité la blusa que me habían dado y no se ve el mallot del club. Mi padre y Chano me matan, seguro.


Me fui a mi casa muy contento. La medalla que me dieron, preciosa con forma de Gran Canaria, me la quité solo para dormir. Y ya estoy preguntándole a mi padre cuando es la siguiente carrera. Ahora a ver si los viejitos, digo, los master de mi club, hacen alguna carrera en Agaete, que esto me gusta mucho.
VI Cronoescalada Atlefuca Barranco de Telde 2018, Campeonato de escuelas (Gran Canaria)


Más información:

Página de la Federación insular de ciclismo de la carrera: http://yosoyciclista.com/index.php/inscripciones/prueba/9142

Información de contacto del club Atlefulca

Escuela de Ciclismo Tamadaba Biker - 4G Flota: http://www.4gflota.com/sponsor/escuela-ciclismo/

Artículos de pedaleando por Canarias acerca de la carrera: http://pedaleandoporcanarias.com/2018/04/un-puente-muy-lejano-4a-prueba-de-escuelas-de-ciclismo-2018-en-gran-canaria/ y http://pedaleandoporcanarias.com/2018/04/protagonistas-en-la-4a-prueba-de-escuelas-de-ciclismo-barranco-de-telde-en-gran-canaria/